Meta es un conglomerado estadounidense de tecnología y redes sociales con sede en Menlo Park, California. Es la empresa matriz de Facebook, Instagram, WhatsApp, Threads y otras subsidiarias de servicios, incluidos Facebook Messenger, Facebook Watch y Facebook Portal, cuyo propietario y CEO es Mark Zuckerberg.
Grupos europeos de derechos de los consumidores acusaron a Meta de llevar a cabo una operación “masiva” e “ilegal” de recopilación de datos de cientos de millones de usuarios en la región.
La Organización Europea de Consumidores (BEUC), un organismo que agrupa a 45 grupos de consumidores, dijo que ocho de los grupos estaban presentando quejas ante sus respectivas autoridades nacionales de protección de datos este jueves.
Los grupos afirman que Meta recopila una cantidad innecesaria de información sobre sus usuarios, como datos utilizados para inferir su orientación sexual, estado emocional o incluso su susceptibilidad a la adicción, a la que no pueden dar su consentimiento libremente.
Las prácticas de la empresa, argumentan los grupos, violan partes de la ley de privacidad de datos característica de la Unión Europea, el Reglamento General de Protección de Datos o GDPR.
“Con sus prácticas ilegales, Meta alimenta el sistema de anuncios basado en vigilancia que rastrea a los consumidores en línea y recopila grandes cantidades de datos personales con el fin de mostrarles anuncios”, dijo la BEUC en un comunicado.
Las quejas expondrán a la compañía, durante años objeto de un intenso escrutinio regulatorio en Europa, a aún más acciones legales.
En mayo pasado, los reguladores de la UE multaron al gigante tecnológico en U$S 1.300 millones por violar las normas del RGPD al transferir datos personales de los usuarios de Facebook a servidores en Estados Unidos.
En octubre, los reguladores de la UE obligaron a Meta a solicitar el consentimiento explícito de sus usuarios para procesar su información personal con el fin de entregarles publicidad dirigida.
Varios días después, Meta lanzó un servicio de suscripción que permitía a sus usuarios europeos pagar hasta U$S 14 al mes para utilizar versiones sin publicidad de Facebook e Instagram.
A partir del viernes 1 de marzo, también planea introducir cargos mensuales adicionales por cada nueva cuenta que un usuario configure como parte de esa oferta.
Meta dice que el servicio es parte de sus esfuerzos por cumplir con el GDPR. Pero la BEUC argumentó este jueves que el servicio de suscripción de Meta ofrece a los usuarios “una elección injusta y engañosa”, ya que su procesamiento de datos no es transparente, lo que significa que los usuarios no pueden saber cómo la suscripción cambiaría la forma en que se procesa su información.
Además, el dominio del mercado de Meta significa que los usuarios no pueden abandonar fácilmente sus plataformas sin aislarse de sus familiares y amigos. La organización presentó una queja ante las autoridades europeas de protección del consumidor en noviembre, argumentando que este enfoque de “pago o consentimiento” era un ejemplo de práctica comercial injusta y “agresiva” prohibida por la legislación de la UE.
“La oferta de Meta a los consumidores es humo y espejos para encubrir lo que es, en esencia, la misma vieja acumulación de todo tipo de información sensible sobre la vida de las personas, que luego monetiza a través de su modelo publicitario invasivo”, dijo Ursula Pachl, subdirectora general del BEUC, este jueves en un comunicado mientras Mark Zuckerberg realiza una visita a Corea del Sur, donde se reunió con el presidente de ese país Yoon Suk Yeol.