El subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio, sostuvo que la suspensión de vuelos de aviones Boeing 737 Max 9 en todo el mundo –y que en Uruguay opera la compañía Copa Airlines– responde a “un tema de fuerza mayor y seguridad”, luego de que parte del fuselaje de una aeronave de ese modelo saliera disparada en medio de un vuelo en Estados Unidos.
La Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) de Estados Unidos ordenó el pasado 7 de enero inmovilizar a todos los aviones Boeing 737 Max 9 debido al incidente ocurrido en Estados Unidos durante un vuelo de Alaska Airlines.
“Lo que pasó es que un vuelo de Alaska Airlines perdió la ventanilla de seguridad de un Boeing 737 que determinó que la organización de seguridad de Estados Unidos dijera: ‘Todas las aerolíneas que vuelan con esos aviones los tienen que dejar en tierra y pasar un proceso de revisión y calificación que iba a durar aproximadamente una semana”, sostuvo Monzeglio al ser consultado por Subrayado.
A pesar de que la fecha estimada era de una semana, la autoridad estadounidense sostuvo en un comunicado divulgado el pasado 13 de enero que la medida sigue vigente mientras se realizan inspecciones exhaustivas y de mantenimiento, además de revisar los “datos de las investigaciones”.
Para Monzeglio lo que sucedió con esos aviones –que operan varias aerolíneas a nivel mundial pero que a Uruguay llegan por Copa Airlines– no determina “una responsabilidad directa de la aerolínea”, salvo la “devolución del tramo que se le compró”.
Consultado sobre cómo deberían reaccionar los pasajeros, el subsecretario de Turismo respondió: “Es un tema de fuerza mayor y por seguridad”.
“Obviamente, acá es donde revalorizamos la figura del agente de viajes porque al menos tenemos alguien que nos va guiando y nos representa. Todos nos vemos tentados a hacer la compra no reembolsable en los hoteles porque es más barato, compramos por antelación los viajes y por internet. Pero la tarea del agente de viajes es protegernos. Ojalá que se normalice pronto esa situación”, señaló.
En el último comunicado de la Administración Federal de Aviación se sostenía que la decisión de mantener los aviones en tierra era para preservar la “seguridad de los viajeros”, en ese caso estadounidenses.
El 5 de enero un vuelo de Alaska Airlines tuvo que ejecutar un aterrizaje de emergencia después de la explosión de un panel del fuselaje cuando el avión sobrevolaba el estado de Oregón, en el oeste de Estados Unidos. No hubo víctimas mortales ni heridos graves.
El regulador estadounidense abrió una investigación sobre el incidente, un nuevo revés para el fabricante, sobre todo con el 737 MAX.
Los peores accidentes con este modelo ocurrieron en un vuelo de Lion Air en octubre de 2018 y otro de Ethiopian Airlines en marzo de 2019 que causaron la muerte de 346 personas en total.
Tras estos siniestros, los aparatos 737 MAX de Boeing estuvieron en tierra en todo el mundo durante 20 meses.
Copa Airlines suspende vuelos
Dos días después del incidente de Alaska Airlines y el mismo día que el regulador estadounidense tomó la decisión de dejar en tierra las aeronaves, la aerolínea panameña Copa Airlines anunció que suspendía las operaciones de 21 aviones Boeing 737 Max 9 mientras eran sometidos a “una revisión técnica”.
La medida afectó vuelos que partían y llegaban a Uruguay. Copa Arilines dijo entonces que había iniciado “las inspecciones técnicas requeridas” y que esperaba que las aeronaves pudieran regresar 24 horas después. Esto, sin embargo, no sucedió y la medida sigue vigente.
“El equipo humano de Copa Airlines trabaja para minimizar las afectaciones a nuestros pasajeros, aun cuando se prevén algunos atrasos y cancelaciones por esta situación fuera del control de la aerolínea”, agregaba el comunicado de la empresa.
Los vuelos afectados por esta suspensión temporal son unos con salida de Panamá hacia Ecuador, Canadá, Argentina, Uruguay y Brasil, y otros con llegada al país centroamericano procedentes de Brasil, Uruguay, Honduras, Estados Unidos, Guatemala y Costa Rica, según la información difundida por la prensa local.