El Banco Central del Uruguay (BCU), resolvió este jueves mantener la tasa de interés de política monetaria (TPM) en 9%. Esta pausa en el ciclo de recortes ocurre en un escenario de inflación controlada que lleva 8 meses dentro de la meta oficial (3% y 6%), y con el promedio de expectativas de analistas, empresarios y mercado financiero en mínimos históricos (6,41%), pero todavía por encima del techo del rango.
La inflación en el año cerrado a enero se ubicó en 5,1%, niveles mínimos desde 2005. El Comité de Política Monetaria (Copom), destacó que la decisión de mantener la tasa tiene “el objetivo de contribuir a consolidar la inflación dentro del rango meta y continuar la convergencia de sus expectativas a 24 meses al centro del rango” (4,5%), según el comunicado de la reunión. La decisión está el línea con lo esperado por el mercado.
Las expectativas
La autoridad monetaria proyecta que la inflación interanual se mantendría dentro del rango meta durante todo el horizonte de política monetaria, terminando en 5,3% en 2025. En particular, la proyección sitúa a la inflación en 4,9% para el cierre del año 2024.
Los analistas privados esperan actualmente en mediana una inflación de 6 % para el horizonte de 24 meses, según la última encuesta de expectativas del BCU. Esa proyección se ubica en el techo del rango meta, pero todavía distante del centro del rango (4,5%).
En tanto, las expectativas de los empresarios se ubican actualmente en el eje de 7% para los próximos dos años, según la encuesta que realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE)
“Poco espacio” para bajar la tasa
Entre julio de 2021 y diciembre 2022 cuando la inflación estaba en niveles de 8% y 9% el BCU llevó adelante una política contractiva que subió la tasa de interés en 12 oportunidades. En ese período la TPM pasó de 4,5% a 11,5%. Luego en 2023 y a medida que las expectativas mejoraron se inició un ciclo de seis recortes que llevaron la TPM hasta los niveles actuales.
Algunos analistas han señalado que si la prioridad es que la inflación converja al centro del rango meta (4,5% en 2025) el margen para seguir bajando la TPM sin entrar en terreno expansivo es reducido. En declaraciones al semanario Búsqueda, el presidente del BCU, Diego Labat, dijo semanas atrás que hay “cierto espacio” para bajar la tasa, “pero poco”.
Tasas y política monetaria
Una de las finalidades del Banco Central es la estabilidad de precios, como forma de preservar el valor de la moneda, o sea la capacidad de compra del peso uruguayo.
La actual política monetaria en Uruguay es un esquema de metas de inflación basado en tasas de interés. La variable principal de referencia es la tasa del mercado de dinero interbancario (tasa call) a 1 día de plazo.
La política monetaria busca que esta tasa transmita su señal al resto de las tasas de interés de la economía consistente con el objetivo de inflación. Es decir, termina incidiendo en el costo del dinero de los eslabones de la economía doméstica.
Economía “en crecimiento”
El análisis de coyuntura que realiza el Copom para tomar la decisión también dice que en Uruguay, la actividad mostró un incremento en el último trimestre a partir del repunte de la agricultura luego de superar los efectos de la sequía. “Las proyecciones de corto plazo sugieren que la economía continuaría en crecimiento en los dos trimestres siguientes”.