El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de El Salvador hizo pública en la noche del sábado el acta que dejó en firme la arrasadora reelección del presidente Nayib Bukele en los comicios del pasado 4 de febrero.
El documento, adjunto en la red social X señaló que “se declaran electos presidente y vicepresidente de la República de El Salvador al señor Nayib Armando Bukele Ortez y al señor Félix Ulloa, respectivamente”. Y consignó que Bukele ganó con el 84,65% de los votos emitidos, ampliando aún más la victoria, ya que el pasado 9 de febrero, cuando finalizó el escrutinio de las elecciones, el TSE había anunciado que el porcentaje obtenido por el mandatario era de 82,66% de los votos válidos.
Por su parte, el comunicado dijo que el candidato presidencial de la exguerrilla izquierdista del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), Manuel Flores, quedó en segundo puesto con un lejano 6,40% de la votación, mientras que Joel Sánchez, de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), obtuvo 5,57%. Según el TSE, el padrón electoral incluyó a 6,2 millones de personas de las cuales votaron 3,2 millones, una participación de 52,60%.
Ya que se oficializó la victoria, se prevé que en los próximos días el TSE entregará a Bukele y a Ulloa las credenciales que los acreditan como presidente y vicepresidente reelectos por un nuevo período presidencial de cinco años que comenzará el próximo 1° de junio.
El TSE todavía escruta las elecciones legislativas, en las que el partido Nuevas Ideas (NI), de Bukele, se encamina a ser el mayoritario en el Congreso, que pasará de tener 84 escaños a 60, luego de una reforma a la ley electoral. Ante la tardanza, la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) se declaró “preocupada”.
En un comunicado emitido el sábado, la misión manifestó “preocupación por la demora y falta de uniformidad en el escrutinio final”. El documento agregó que la OEA observó “una falta de control por parte del Tribunal Supremo Electoral sobre el desarrollo de esta etapa en la que, en muchas ocasiones, las decisiones quedan en manos de los representantes de los partidos políticos”.
(Con información de AFP)