El juez del juicio penal al expresidente Donald Trump reanudó este viernes la selección de los seis suplentes que complementarán el jurado encargados de juzgar al republicano que aspira a volver a la Casa Blanca en noviembre.
Tras el juramento de los 12 miembros del jurado el jueves, el juez Juan Merchan espera completar este viernes la selección de los suplentes en caso de que se produzca alguna baja durante el proceso contra Trump, acusado de encubrir dinero pagado a una exactriz porno para comprar su silencio en la recta final de la campaña electoral de 2016 que le llevó a la Casa Blanca.
A su llegada a la corte, Trump se pronunció acerca del caso y calificó de “muy injusta” la orden que le impide atacar a testigos, fiscales y familiares del personal del tribunal.
“El juez tiene que retirar esta orden de mordaza”, dijo Trump, que tiene un largo historial de hacer declaraciones amenazantes o insultantes contra oponentes privados y públicos.
Un grupo de 22 candidatos regresó este viernes a la sala para responder a preguntas sobre su profesión, lugar de trabajo, diarios que leen y redes sociales que utilizan.
Merchan espera empezar el lunes con la presentación de los argumentos de la acusación y de la defensa en uno de los varios frentes legales que aguardan a Trump, quien en plena campaña electoral se dice víctima de una “caza de brujas” orquestada por los demócratas para impedirle su anhelo de volver a la presidencia de Estados Unidos.
El proceso, que ha sido mucho más rápido de lo que se esperaba, sufrió el jueves un pequeño contratiempo al excluir dos de los 7 miembros que habían sido seleccionados, aunque los reemplazantes fueron elegidos, junto con los 5 que faltaban para completar el panel.
Para proteger el anonimato de los neoyorquinos seleccionados por sorteo para prestar servicio como jurado, Merchan pidió a los periodistas que dejen de facilitar descripciones físicas de los miembros del jurado y que no divulguen dónde trabajan.
Se espera que el juicio en el Tribunal Supremo de Manhattan dure unas seis semanas durante las que desfilarán testigos como el exabogado derecha del magnate, Michael Cohen, que puso de su bolsillo los 130 mil pagados a la exactriz Stormy Daniels y que Donald Trump se los devolvió haciéndolos pasar como gastos legales de su empresa.
El magnate republicano se enfrenta a otras tres causas penales, entre ellas por cargos mucho más graves de intento de anular su derrota electoral de 2020 frente a Biden, pero que se han retrasado repetidamente y es poco probable que ahora se vayan a celebrar antes de las elecciones.
Si es declarado culpable, podría enfrentarse a la cárcel, pero lo más probable es que se le imponga una multa. El veredicto del jurado debe ser unánime.
El magnate de 77 años, que se ha declarado no culpable de las acusaciones de la fiscalía de Manhattan, volvió a lamentarse el jueves de tener que estar “en un juicio muy injusto” en vez de hacer estar haciendo campaña.
“El mundo entero está viendo este engaño”, dijo, utilizando de nuevo el caso para lanzar sus ataques electorales contra el presidente Joe Biden.
Con información de AFP