Líderes de la antigua guerrilla colombiana FARC dirigieron una carta al presidente Gustavo Petro en la que acusan al tribunal de paz creado en el acuerdo con el gobierno de provocar “graves alteraciones” a lo pactado en 2016, cuando aceptaron dejar las armas.
En la misiva de tres páginas y firmada por siete miembros del secretariado de la que fuera la organización rebelde más poderosa del continente y ahora partido Comunes, señalan a la Justicia Especial para la Paz (JEP) de “alejarse del espíritu y la letra de lo acordado” hace poco más de siete años.
Según los antiguos guerrilleros, “persistir” en los “incumplimientos” por parte del tribunal “estaría llevando a los firmantes y comparecientes a apartarse de las decisiones proferidas por esa jurisdicción”.
Los líderes del actual partido de izquierda Comunes dicen que la JEP hace “sus propias interpretaciones a un texto que es claro en sus propósitos de paz, dado el carácter político del acuerdo que firmamos con el Estado, pretendiendo llevarlo a un terreno judicial punitivista”.
El tribunal surgido del histórico acuerdo juzga los peores crímenes del conflicto armado y ofrece penas alternativas a la cárcel a quienes confiesen la verdad y reparen a las víctimas.
La directora de la división de las Américas de Human Rights Watch, Juanita Goebertus, tildó de “amenaza” la carta de Comunes contra el tribunal de paz.
“Desconocer sus decisiones atentas contra los derechos de las víctimas y la independencia de la JEP”, indicó en la red X.
En la carta, los exguerrilleros también afirman que, desde la firma de la paz, 418 excombatientes fueron asesinados, pero aplauden la “voluntad” del gobierno izquierdista de “cumplir cabalmente con los compromisos adquiridos por el Estado”.
La carta se dio a conocer en el marco de una visita del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a Colombia entre el 7 y 11 de febrero, para apoyar la implementación del acuerdo de paz.
El tribunal imputó a la cúpula de las FARC por cientos de secuestros, y a exmilitares por asesinatos de civiles, pero aún no dictó su primera condena desde su creación en 2017.
(Con información de AFP)