La vuelta al gol de Edinson Cavani en Boca Juniors, con sus tres tantos ante Belgrano el pasado domingo, fue especialmente celebrada por Giorgio Armas, el popular astrólogo de Boca y del fútbol argentino, quien hizo un trabajo para que el atacante regresara a su mejor nivel.
El especialista en rituales, como se presenta en sus redes, festejó los goles de Cavani.
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Edinson Cavani
“Lo logramos la ptm! Gracias… ¡Limpiamos al Matador!”, señaló en X.
Armas recordó que a principios de febrero hizo un trabajo para que Cavani cortara su sequía de goles.
“El sábado haremos un ritual de protección para @ECavaniOfficial. Los que me quieran ayudar un like”, señaló en X el pasado 3 de febrero.
Tras los tres goles de Cavani, Armas señaló que el uruguayo volverá a marcar.
“Yo siempre lo dije: ‘Si Cavani mete uno, mete diez'”, dijo a radio La Red de Buenos Aires. “Por astrología él debería hacer muchos goles, pero no se le daba”.
El astrólogo también cuestionó a quienes fueron duros con el delantero. “Había mucha gente criticando a Cavani; espero que ahora pidan disculpas. Hay que estar siempre arriba del barco, yo nunca me bajé”.
“Cuando agarró la pelota Cavani dije: ‘Se acabó el mala energía'”, comentó el especialista.
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Edinson Cavani
Además, ya tiene su pronóstico para este 2024: “Este año lo veo campeón a Cavani con Boca. También a (Diego) Martínez”, dijo, sobre el DT xeneize.
Cavani pudo al fin concretar en las redes el romance que lo unía con Boca Juniors, el club al que llegó a mediados del año pasado, y con un triplete anotado en 16 minutos en la victoria 3-2 frente a Belgrano se ganó la ovación de una Bombonera extasiada con su jerarquía.
El artillero, de 37 años, llegaba al choque contra Belgrano agobiado por una extensa sequía de casi cinco meses sin anotar, entre algunas ausencias por lesión y también partidos en los que el gol se le negó de manera sistemática, casi hasta abajo del arco rival.
Cavani había señalado su último tanto para Boca el 15 de octubre pasado contra Talleres por la Copa Argentina, y desde entonces pasaron 594 minutos hasta volver a su habitual festejo del arquero que dispara una flecha, incluida una discreta participación en la final de la Copa Libertadores que Boca perdió con Fluminense en el Maracaná.