La irrupción de un grupo de manifestantes en una reunión de un comité parlamentario en Israel es la última muestra de presión sobre las autoridades israelíes de los familiares de rehenes retenidos en Gaza, que exigen que el Gobierno priorice en su estrategia la liberación de sus seres queridos.
Decenas de familiares de rehenes israelíes retenidos por Hamás en Gaza irrumpieron este lunes en una reunión del Comité de Finanzas en el Parlamento de Israel, la Knesset, con sede en Jerusalén, al grito de “¡no se queden sentados aquí mientras ellos están muriendo allí!”.
“¡Estos son nuestros niños!” gritaron los manifestantes. “No podemos continuar con ninguna otra agenda, ¡solo hay una cosa que necesitamos discutir ahora mismo!”, añadieron.
Algunos fueron inmovilizados físicamente mientras gritaban a los legisladores y al menos una persona fue escoltada fuera de la sala. La reunión se suspendió brevemente pero luego se volvió a convocar.
El domingo por la noche, familiares de los rehenes y otros manifestantes instalaron un campamento con tiendas de campaña por fuera de la residencia en Jerusalén del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y prometieron permanecer allí hasta que el Gobierno llegue a un acuerdo para liberar a los rehenes.
Según la Agencia Judía de Noticias, Mor Shamgar, que lidera a la multitud y los cánticos contra el primer ministro Benjamín Netanyahu y el gobierno, afirmó que votó al Likud -el partido oficialista- hasta que Netanyahu asumió el liderazgo del partido.
Shamgar agregó: “Me fui del partido en 1999, cuando me di cuenta de quién es Netanyahu… Sólo se preocupa de sí mismo”.
“Si Yair Netanyahu -el hijo del primer ministro- fuera a ayudar a limpiar en Be’eri -uno de los kibbutzim (comuna agrícola) más afectados por la masacre de Hamás-, o si Avner Netanyahu -el otro hijo del premier- fuera a Kfar Aza -el otro kibbutz más afectado- a ayudar a recoger frutas y verduras, entonces sabría que nuestro primer ministro es fiel a su palabra”, aseguró el hombre que está al frente de los manifestantes.
Shamgar calificó a los partidos de la coalición en el poder como “traidores que renunciaron a los rehenes”.
La presidenta saliente del partido Laborista, Merav Michaeli, estuvo junto con los manifestantes para “remover a este gobierno”.
“La devolución de los rehenes no es una cuestión, es la obligación número uno de este gobierno. Los rehenes fueron abandonados y secuestrados bajo su vigilancia, por lo que tiene que hacer todo lo posible para devolverlos», advirtió Michaeli.
(Con información de agencias)