El expresidente Donald Trump lleva hasta ahora la ventaja frente a la exembajadora ante las Naciones Unidas, Nikki Haley.
Y es que Trump ha arrasado en los cinco estados y un territorio en donde su partido ha celebrado primarias: Iowa, New Hampshire, Nevada, Carolina del Sur, Michigan e Islas Vírgenes.
Pero el “supermartes”, como se le conoce a este día, podría ser la confirmación final de que el también empresario volverá a medirse frente a Joe Biden el próximo noviembre de 2024.
¿Qué tiene de especial el Super Tuesday? ¿Por qué se le llama así? Te lo contamos en esta nota.
Una “superelección”
Durante el supermartes, un numeroso grupo de estados o territorios organiza simultáneamente contiendas electorales que ayudan a definir las candidaturas presidenciales, tanto del Partido Demócrata como del Republicano.
Como Biden no tiene prácticamente competencia en el bando demócrata, las primarias republicanas son las que acaparan este año toda la atención.
El número de estados que participan en el supermartes no es siempre igual. Este año, se celebrará primarias en 15 estados y un territorio: Alabama, Alaska, Arkansas, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennesse, Texas, Utah, Vermont, Virginia y Samoa Americana.
La fecha de la elección varía cada ciclo electoral, pero de ordinario cae entre febrero y marzo.
Con 874 del total de 2.429 delegados en juego en un día, suele ser el momento en el que emerge el favorito a ganar la candidatura presidencial.
Camino a la convención
Sin embargo, Trump ya tiene una ventaja considerable de 122 delegados frente a los 24 de Haley.
Los llamados “delegados” son mayoritariamente activistas o líderes de una comunidad, pertenecientes al partido, que acuden a votar en la Convención Nacional -la culminación del proceso de primarias- por el candidato del partido a la presidencia.
En general, estos delegados votan ateniéndose a los resultados de las primarias: es decir, si un candidato ha ganado dos delegados en un estado, esas dos personas en teoría deberán votar por ese candidato en la convención.
No obstante, hay cierto margen de flexibilidad y dado que la política es muy cambiante, se pueden dar situaciones en las que esos delegados hayan sido ganados por un candidato que se salió de la carrera y no llegó a la convención.
Pero lo cierto es que Haley solo tiene una posibilidad teórica de impedir que el expresidente consiga la nominación.
Aun así, la votación continuará hasta junio de 2024 si ella decide permanecer en la carrera.
Este año, la Convención Nacional Republicana se celebrará del 15 al 18 de julio en la ciudad de Milwaukee, mientras que la Demócrata del 19 al 22 de agosto en Chicago.
La ventaja de Donald Trump
Trump sigue siendo el candidato con mayor posibilidad de ganar la nominación, después de triunfar en las seis elecciones primarias celebradas hasta ahora.
No igualó la ventaja de 20 puntos en New Hampshire prevista por las encuestas.
Pero cada victoria acerca a Estados Unidos un paso más a una revancha entre el expresidente y Biden.
No obstante, estos meses serán muy ocupados para Trump. No solo se postula para la Casa Blanca, también enfrentará varios procesos legales en los tribunales, incluido los cargos penales por el intento de anular los resultados de las elecciones de 2020.
Él niega haber actuado mal y dice que las acusaciones son políticas.
Incluso si fuera condenado o encarcelado, podría permanecer en la carrera por la Casa Blanca.
La exdiplomática Haley es la única oponente que le queda a Trump.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, así como otros candidatos presidenciales, incluido el empresario indio-estadounidense Vivek Ramaswamy y el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie, abandonaron la carrera y apoyaron al exmandatario.
Habiendo perdido ante Trump en todas las primarias, incluso en su estado natal de Carolina del Sur, Haley dice que permanece en el proceso de primarias porque los votantes “tienen derecho a una elección real, no a una elección al estilo soviético con un solo candidato”.