La Universidad de Harvard reveló un método para dormirse en menos de 5 minutos basada en una técnica antigua de yoga conocida como 4-7-8.
Conciliar el sueño puede ser un problema. Por estrés, situaciones personales, familiares o por una patología vinculada a la narcolepsia, este tipo de trastornos pueden ser comunes.
Sin embargo, el doctor Andrés Weil de la prestigiosa facultad norteamericana contó una innovadora herramienta para conciliar el sueño.
¿Cómo es el método de Harvard para dormirse en menos de 5 minutos?
La técnica 4-7-8 fue difundida por el médico Michel Breus que también señaló los casos de las personas que se duermen entre 10 y 20 minutos después de apagar las luces. Weil señaló que su técnica reduce el promedio a 60 segundos.
Este método está basado en una antigua práctica de yoga llamada pranayama, creada para quienes tienen problemas para dormir y que no encontraron respuesta a esta afección. De hecho, lo mejor de este descubrimiento es que no tiene contraindicaciones.
Los 5 pasos para efectuar esta práctica:
- Colocar la punta de la lengua detrás de los dientes superiores frontales;
- Cerrar la boca y respirar por la nariz durante 4 segundos;
- Aguantar la respiración en los pulmones por 7 segundos;
- Expulsar todo el aire acumulado durante 8 segundos,
- Repetir el proceso 3 veces.
¿Cuál es la efectividad y cómo aplicar bien la técnica 4-7-8?
El doctor de Harvard contó que este trabajo se asemeja a un “tranquilizante natural para el sistema nervioso y consiste en cuidar la forma en cómo respiramos y corregir esto si es necesario. Por lo que llenar de oxígeno la parte baja de los pulmones, le dará un perfecto equilibrio al sistema nervioso y nos brinda un estado de relajación profunda“.
“Si tiene problemas para contener la respiración, acelere el ejercicio, pero manteniendo la proporción (constante) de las tres fases. Con la práctica, puede reducir la velocidad y acostumbrarse a inhalar y exhalar cada vez más profundamente”, aconseja el especialista.
Para incorporar la técnica es necesario dominar la respiración. Por lo tanto, la clave está en la constancia, pero también se recomiendan hábitos saludables basados en rutinas de sueño, actividad física y una dieta balanceada.