La Justicia dispuso una serie de medidas limitativas de la libertad para Romina Camejo, de 26 años, que disparó y mató a su expareja, el empresario y propietario de La Maison, Gonzalo Aguiar. 

El fiscal del caso Sebastián Robles pidió –y el juez aceptó– que la mujer fije domicilio, que se le prohíba salir de Montevideo y que se le retenga el pasaporte. Tampoco podrá comunicarse con testigos de la causa y además se le cerrarán las fronteras. Todas son por 150 días. 

Según argumentó el fiscal en la audiencia, las medidas solicitadas fueron para “asegurar” la investigación y debido a que quedan pendientes “diligencias necesarias” para determinar cómo fueron los hechos. De esta manera, mientras duren las medidas limitativas el fiscal intentará determinar si la muerte de Aguiar fue un homicidio o si se trató de un caso de legítima defensa, como sostiene la defensa de la mujer. 

“Se entendió prudente dado los acotados tiempos solicitar todas las medidas y continuar la investigación para esclarecer los puntos. Esto no quiere decir que se vaya a archivar. Queremos corroborar esa teoría o no de legítima defensa“, aseguró Robles en rueda de prensa. “Ni se formalizó la investigación ni se ha archivado el caso“, agregó. 

María Eugenia Scognamiglio

La audiencia en la que se fijaron las medidas limitativas

Por su parte, el abogado de Camejo, Camilo Silvera, dijo que estaba “conforme” con la decisión. “Lamentablemente falleció una persona pero podríamos estar hablando de un femicidio“, aseguró a la salida de la audiencia. “El miedo predomina en ella desde siempre y si es necesario vamos a solicitar medidas. Ella está destrozada. Hoy empieza una película y es el fin de otra“, agregó. 

Aguiar, que era investigado por la Fiscalía de Delitos Económicos por estafa y lavado de activos, tenía 46 años y fue asesinado de varios disparos en la madrugada del lunes en una casa de Punta del Este. En ese lugar estaban Camejo, su hija de seis meses (que había tenido con el empresario) y otras personas. 

Según había señalado Silvera a El Observador, Aguiar había llegado “totalmente sacado” a la casa donde estaba la mujer y antes la había amenazado de forma telefónica con “cortarla en pedacitos”. Esto según el relato que la mujer hizo a su representante legal, que en busca presentar el caso como de legítima defensa. 

María Eugenia Scognamiglio

La casa donde ocurrió el asesinato

Camejo alegó también en su relato que el empresario –de quien estaba separada hace meses– era “violento” y que “siempre estaba armado”, por lo que sintió “miedo” cuando lo vio llegar. 

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