Donald Trump busca asegurarse la nominación republicana a las elecciones presidenciales de Estados Unidos luego que la carrera se redujera a dos contrincantes por la retirada del gobernador de Florida, Ron DeSantis, antes de las primarias que se celebrarán el martes en New Hampshire.
A no ser por una derrota en este estado del noreste del país, o de un reñido segundo puesto para su única rival Nikki Haley, el calendario para la nominación de Trump como rival del presidente Joe Biden en noviembre podría acelerarse, según los analistas locales.
El expresidente obtuvo la semana pasada una clara victoria ante DeSantis en Iowa, con Haley en tercer lugar, y hasta ahora ningún candidato falló en obtener la nominación por el Partido Republicano tras conquistar las primarias en los primeros dos estados del calendario.
Esto hace de New Hampshire un todo o nada para Haley, quien fuera embajadora ante la Naciones Unidas (ONU) en el gobierno de Trump, y que va por detrás de su antiguo jefe en las encuestas en el que se considera su estado más fuerte.
Trump redobló sus ataques contra Haley, calificándola de “no suficientemente inteligente” y de no ganarse el respeto de los votantes. Ayer, luego que DeSantis anunciara que se retiraba de la interna, el expresidente calificó al gobernador de Florida como una “persona muy capaz” al aceptar su respaldo.
“Con DeSantis tenemos políticas similares. Fronteras fuertes, buena educación, impuestos bajos, muy pocas regulaciones, tan pocas como sea posible, cosas de las que Haley realmente no habla porque ella es una globalista”, dijo el expresidente ante un numeroso grupo de seguidores del gobernador de Florida en el estado de Massachusetts.
Haley, por su parte, criticó recientemente a Trump al referirse a sus capacidades mentales cuando lo cuestionó por confundirla con la veterana demócrata Nancy Pelosi. “Simplemente no está al mismo nivel que en 2016. Creo que estamos viendo algo de ese declive. Pero más que eso, el problema es que el caos lo persigue”, dijo a la cadena de noticias CBS en referencia a los problemas judiciales que enfrenta.
Con DeSantis fuera de carrera, Haley busca apoyo en la alta proporción de independientes de New Hampshire, a quienes se les permite votar en las primarias de cualquiera de los partidos y normalmente optan por los candidatos más moderados, para montar lo que algunos analistas describieron como su “última resistencia”.
Sin embargo, según los sondeos, Haley enfrenta un camino cuesta arriba. Una encuesta publicada en las últimas horas señala que la candidata tiene en promedio 15 puntos de desventaja y está aparentemente estancada, y sólo un resultado sobresaliente podría convertirla en una amenaza genuina para el expresidente de cara a su estado natal, Carolina del Sur, a finales de febrero.
New Hampshire es un pequeño premio en una larga carrera, ya que asigna sólo 22 de los 2.429 delegados a la convención republicana que se realizará en Milwaukee en julio próximo. Sin embargo, según los analistas, es un indicador más confiable del éxito electoral a nivel nacional que los estados más conservadores, y se considera que marcará la pauta de las próximas primarias.
Más allá de la votación de mañana, las miradas siguen puestas muy especialmente en el llamado “supermartes” del 5 de marzo, oportunidad en la que estarán en juego 874 delegados, las tres cuartas partes del total requerido para obtener la nominación.
Los asesores de Trump apuestan a estar en condiciones de liquidar la carrera una semana después y quieren que finalice en abril; es decir: casi con certeza antes de que comience cualquiera de los varios juicios penales en los que está envuelto el expresidente.
Por su parte, los demócratas también tendrán el martes 23 su propia primaria en New Hampshire. Biden, sin embargo, no estará en la boleta después de que funcionarios locales demócratas discreparan con las autoridades nacionales del partido por el calendario.
Sus seguidores, no obstante, dicen que votarán por Biden en todo caso escribiendo su nombre en la boleta con la esperanza de que aún pueda vencer al congresista de Minnesota Dean Phillips y a la autora de libros de autoayuda Marianne Williamson, dos candidatos que, según el consenso, carecen de chances de alcanzar la nominación.
El resultado, no obstante, no afectará el proceso de nominación, debido a que el Comité Nacional Demócrata declaró ilegítimas las primarias de New Hampshire, y se espera que el Biden sea finalmente nominado a mediados de año.
(Con información de AFP)