En la mañana de este sábado, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, hizo una última “rendición de cuentas” ante el Parlamento como ha acostumbrado hacer los 2 de marzo desde que asumió en 2020. Tanto desde el oficialismo como desde la oposición se destacó que fue un discurso de “estadista” o “republicano”. Así lo entendieron también los politólogos Gonzalo Puig y Mauro Casa.
Puig comparó la exposición de Lacalle Pou a la que tuvo el presidente en 2023 y también a la que hizo en 2019 el por entonces mandatario Tabaré Vázquez.
El del año anterior, para el politólogo, había sido “más legislativo” y “proactivo” porque había varios proyectos pendientes, como la reforma de seguridad social, y Lacalle Pou “enfatizó qué era lo que más le importaba”. “Este fue más de rendición de cuentas, como un cierre de la Presidencia muy bien hecho”, valoró Puig.
Sobre este último punto, dijo que se asimiló al de Vázquez cuando también hizo un balance de todo su gobierno, no solo de 2018. Sin embargo, consideró que el del frenteamplista fue más “electoral” cuando tanto él como Lacalle Pou se enfrentaron a un discurso en el último año de su administración con encuestas que favorecen a la oposición.
Puig opinó que es “anticuado” que un presidente no pueda hablar de temas electorales y dijo que en este caso el propio Partido Nacional sería el que podría “lamentarse” y plantearse “¿por qué mi mejor jugador no salió a hacer esto?”.
Mientras que afirmó que para el Frente Amplio “políticamente no sería acertado criticar este discurso” porque sería pedirle a Lacalle Pou “meterse en campaña”.
Por su parte, Casa también recordó que la oposición ha tenido un crecimiento en las encuestas y que además el presidente venía con “un contexto desfavorable por los casos de corrupción y por un funcionamiento de la coalición que actualmente está prácticamente detenido.
“No era fácil para el presidente poder encontrar un buen tono para dar este discurso del día de hoy, tras un año donde estuvo bastante cascoteado”, dijo el politólogo.
En este sentido, destacó como “importante” que esté “retomando a un tono más atildado, más de estadista” porque a su criterio “las últimas intervenciones públicas del presidente habían sido bastante fuera de tono”.
“Y luego los últimos cruces que ha tenido con Yamandú Orsi y con Andrés Lima, que han sido muy poco elegantes y no algo de alta política, sino todo lo contrario”, añadió.
Los temas que trató Lacalle Pou
Puig sostuvo que Lacalle Pou es generalmente “muy sólido en la oratoria” y que esto se notó en su exposición. Pero aunque destacó la “transparencia” de que el presidente tratara varios temas opinó que “se aventuró en temas que podría no haber tocado para hacer un discurso más compacto”.
El politólogo dio los ejemplos de “seguridad social” y “el tema impositivo” aunque en este último “no entró mucho”.
Casa señaló que Lacalle Pou “habló de baja de impuestos, de cumplimiento de metas fiscales, de una baja inflación y del crecimiento del empleo” y dijo que “van a ser todos ellos indicadores que son motivo de disputa política” en la campaña.
Al respecto, dijo que “como analista” le preocupa mucho que “Uruguay haya ingresado en una era de desinformación donde cada vez hay menos consenso dentro de la clase política respecto a los datos y los indicadores”.
Sobre la reforma de la seguridad social dijo que por “envergadura y por permanencia en el tiempo” es “la reforma más relevante que logró pasar el presidente” dentro de una “agenda general” del gobierno “bastante poco ambiciosa”.
Apuntó también a que el presidente se refirió al “costo político” de la reforma por efectivamente lo tiene al ser “evaluada negativamente por la mayoría de la ciudadanía, a nivel de encuestas” y porque va a estar en el debate público debido al plebiscito que impulsa el PIT-CNT y que apoyan algunos sectores del Frente Amplio.
Sobre la educación, criticó que Lacalle Pou hablara del “hito” del aumento “en los niveles de egresión secundaria de un 40% a un 50%” cuando “si uno lo mira con lupa” es porque “se han modificado los criterios de evaluación y se ha vuelto mucho más laxo todo”, dijo Casa.
Uno de “los pocos mea culpa del discurso de Lacalle Pou” para el politólogo estuvo cuando se refirió a la política exterior.
“Cuando dice que los avances en materia de acuerdos con bloques y otros países no han sido lo que uno hubiera querido”, continuó Casa.
El politólogo dijo que a su criterio es “uno de los puntos más flacos” de este gobierno. “Por un lado la nula concreción de nuevos acuerdos en materia comercial, por otro lado los constantes escándalos en Cancillería”, argumentó.
Finalmente, señaló que el presidente hizo “un énfasis en infraestructura”.
“Me parece que aquí hay un punto a favor del gobierno, cuando habla de rutas, puentes, conectividad, es notoria la inversión”, sostuvo y dijo que esto “lo reconoce hasta Fernando Pereira”.