Los cancilleres Omar Paganini y Diana Mondino acordaron dar continuidad al pedido uruguayo de profundizar el acceso al puerto de Montevideo a 14 metros. Esa una aspiración que lleva años y que ahora logra cierto nivel de avance tras la asunción del gobierno de Javier Milei.
“Lo importante era destrabar el nudo político”, dijeron fuentes políticas a El Observador. Eso fue lo que ocurrió este miércoles entre Paganini y Mondino en una instancia previa a la Reunión de Cancilleres del Mercosur que se desarrolló en Asunción.
El planteo uruguayo de profundizar el canal de acceso lleva más de una década, pero siempre encontró objeciones del lado argentino. Generalmente fueron dentro de la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP). Pero incluso cuando las negociaciones se desarrollaron en otros ámbitos tampoco alcanzaron coincidencias al respecto.
Sin embargo, este miércoles la sintonía política cambió. Los cancilleres acordaron avanzar “a la brevedad” en el dragado a 14 metros. Quedó establecido que el planteo uruguayo vuelva a ser tramitado en la CARP. Para que la profundización del acceso se pueda efectivizar debe tener el aval de las dos delegaciones.
Ministerio de Relaciones Exteriores
Diana Mondino y Omar Paganini
Además coincidieron en la importancia de afianzar los vínculos económicos y comerciales para dinamizar el comercio bilateral. También en la necesidad de avanzar en la dinamización del Mercosur para mejorar la competitividad y la inserción internacional de los países que lo integran.
Mondino ya había dado muestras de querer dar vuelta la página y asumir otra postura de relacionamiento dentro del Mercosur y otorgar al bloque regional mayor flexibilidad.
Este miércoles, los cancilleres emitieron una declaración conjunta. Allí señalaron que “será prioridad concluir los aspectos pendientes de las negociaciones con la Unión Europea y alcanzar la firma de un acuerdo equilibrado para ambas partes a la brevedad posible”.
Las idas y vueltas del pedido de los 14 metros
La solicitud uruguaya atravesó cuatro gobiernos argentinos. El primero se efectuó durante la presidencia de Cristina Fernández en 2013. En ese momento las relaciones portuarias entre los dos países no atravesaban un período de coincidencia.
Ese año, en noviembre, la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, dependencia que realizaba una férrea defensa de las políticas proteccionistas de Cristina Fernández, emitió una resolución que perjudicó la actividad portuaria uruguaya. Ese documento prohibió que carga argentina llegara en tránsito hasta el puerto de Montevideo para ser embarcada luego en buques de ultramar hasta su destino final.
Camilo Dos Santos
Profundizar el puerto a 14 metros
En esa época la mayoría de los trasbordos que recibía Montevideo eran de carga proveniente del sur argentino.
Ese mismo mes la delegación uruguaya presentaba la solicitud de profundizar el acceso a Montevideo.
El proceso de autorización llevó años y en mayo de 2018 Argentina otorgó el consentimiento. Recién en ese momento se constató un error clave cometido por la delegación uruguaya. El documento definitivo, elaborado por la Administración Nacional de Puertos (ANP) y el Ministerio de Transporte (MTOP), indicaba que la profundización solicitada era de 13 metros en vez de 14. Y eso fue lo que terminó aprobando Argentina.
En noviembre de 2022 la delegación uruguaya reiteró el pedido de profundización del acceso y presentó documentación para fundamentarlo.
A principios de 2023, la delegación argentina presidida por Diego Tettamanti realizó 28 objeciones.
En mayo de ese año, Uruguay envió un informe con las respuestas. Semanas después, el 24 de mayo, la delegación argentina volvió a presentar una serie de consultas sobre el proyecto.
En julio, la delegación uruguaya remitió la nueva documentación solicitada. Pero también aclaró que sería la última vez que aportaría información al respecto por entender que se habían cumplido todas las instancias y obligaciones administrativas correspondientes para justificar la profundización del puerto de Montevideo a 14 metros.