La Policía italiana detuvo este miércoles en Génova a 22 personas, entre ellas dos colombianos y un dominicano, pertenecientes a una organización internacional que introdujo en Europa 670 kilos de cocaína procedentes de Latinoamérica.
Según informó la Policía Militarizada de Italia, el grupo criminal, activo desde 2014, recibía la droga en el puerto de Génova, donde llegaban en barcos provenientes de Panamá, República Dominicana y Colombia, así como los aeropuertos de París (Francia) y Ámsterdam (Países Bajos), con un valor en el mercado de 25 millones de euros.
Los narcotraficantes, que también operaban en Venezuela, se servían de la ayuda de trabajadores del puerto de Génova, que facilitaban el transporte de las mercancías sin levantar sospechas.
A los detenidos se les imputan nueve delitos de tráfico internacional de droga, 38 de detención y cesión de droga con agravante de asociación mafiosa por colaborar con una facción de la ‘Ndrangheta -organización criminal italiana-, así como la venta por menor de diversos tipos de estupefacientes.
Además, los agentes requisaron armas de fuego entre las que se encontraban armas semiautomáticas, revólveres, pistolas y una granada de mano.
La organización la dirigía desde prisión Gabriele Puleo, un empresario inmobiliario genovés encarcelado en 2015 por traficar con 970 kilos de cocaína, que operaba a través de un sofisticado sistema de mensajes en clave con los que ordenaba y coordinaba las distintas operaciones.
El pago por los cargamentos se hacía en efectivo a través de intermediarios, con “sistemas extra-bancarios”, y proporcionaban recibos a los compradores, explicó la policía italiana. Entre los detenidos se encuentran una persona de nacionalidad dominicana, dos colombianos, siete albaneses y 12 italianos, que cometieron los delitos entre los años 2014 y 2022.
Los agentes incautaron también de otros bienes como acciones en empresas, vehículos, una cuenta corriente y un anillo de oro blanco con diamantes.
Con información de EFE