Un testigo en el juicio sustanciado en Nueva York al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández aseguró este jueves que entregó US$ 2 millones a cambio de protección a quien antecedió a Hernández en el gobierno, el exmandatario Porfirio Lobo.
El narcotraficante y exalcalde de El Paraíso de Copán, Alexander “Chande” Ardón, condenado en Estados Unidos, hizo un relato minucioso de la vía para ganar alcaldías, escaños en el Congreso y hasta la presidencia en Honduras mediante compra de votos con dinero del narcotráfico.
Este testigo de la fiscalía era el hombre de Joaquín “Chapo” Guzmán en Honduras, pero también le compraba la droga al hermano de Juan Orlando Hernández, Tony Hernández –condenado a cadena perpetua en Estados Unidos por narcotráfico– y compraba y vendía voluntades de políticos.
“Chande” relató que se reunió con Lobo “alrededor de 2008” en un helipuerto en San Pedro Sula para “hablar de narcotráfico” y le pidió “dos millones de dólares” a cambio de protección para seguir haciendo sus negocios.
“Le envié un millón a su casa” después de esa reunión, dijo, y en otra posterior, en la que participó el acusado, le entregó el resto y renovó sus tres exigencias: protección de la fiscalía para no ser detenido o investigado, un puesto para su hermano Hugo en el gobierno y dinero para reparar y pavimentar las carreteras de El Paraíso de Copán, para facilitar el transporte de la cocaína a la vecina Guatemala por unas carreteras sinuosas.
“Don Pepe (Porfirio Lobo), me dijo que si ganaba la elección iba a poner a Juan Orlando como presidente del Congreso”, un puesto de gran importancia ya que tiene la llave del dinero del Estado para la obra pública.
Lobo ganó en los comicios de 2009 y se convirtió en presidente de Honduras desde 2010 a 2014 y Juan Orlando Hernández en presidente del Congreso antes de llegar a la presidencia en la siguiente legislatura por dos mandatos consecutivos (2014-2024).
La misión de Ardón fue asegurar los votos de los diputados a favor de Hernández.
“Yo había financiado parte de la campaña y los había ayudado para que fueran diputados, con dinero del narcotráfico”, precisó.
Dijo también que “Juan Orlando me dijo que no me preocupara por la fiscalía, que me darían protección para lo que me dedicaba yo, para el narcotráfico”.
Llegó a pedir la eliminación de sus competidores en el negocio del narcotráfico como el cartel de los hermanos Valle, y el traslado del entonces jefe de la Policía de Copán, Juan Carlos “Tigre” Bonilla, que después fue nombrado jefe de la Policía nacional y que era uno de los coacusados en este juicio, junto con el expolicía Mauricio Hernández, que se declararon culpables de narcotráfico antes del inicio del proceso.
(Con información de AFP)